Namasté.

bueno, eso, que sí, que pensás en cómo se dan las cosas y sí, todo el aquí y ahora, todo el asumir y hacerse cargo del encuentro de los caminos o lo que sea que fue, de dejar que sea una cosa o no sea nada. Y sobre esas cosas es que pienso, qué onda? porque no entiendo muy bien de qué se trata, si es que estamos en medio de una pausa del tiempo que pasa la rutina pero pasa como nada y crecemos y hacemos y arrancamos, activamos. activar es re importante, si no activás no podés hacer nada y eso pasa, activamos. o no, no sé capaz es una pachorra estirada por todas partes, pero tan llena de cosas lindas que no lo podés creer, es genial , te completa esa parte del día que te falta y pum, dónde estás parado? acá, ahora, pero no conozco nada, es cualquiera y es todo también. y entonces mirás y hay alguien o hay una foto o hay una mamá pasando o un bichofeo. esas cosas que antes de ayer no escuchabas por distraído, eso que te hace dar cuenta que estás en ese lugar, vivo, haciendo, decidiendo. entonces ves y tomás una decisión, quiero esto voy, hago, soy. es un pasito nomás para estar donde querés estar. y ves y sonreís y sos feliz un rato más, eso me pasa un poco y me entretengo y me río y me precipito, me precipito mucho y es como que no tengo frenos y no hay forma de soltar el acelerador, manejás, a mil, pero manejás y es todo un riesgo todo un paso en falso. inseguridad. qué te pasa? hace 20 minutos, antes de que siquiera pensaras en esto, eras el tipo más convencido de sí del mundo. ahora se afloja todo, no sale como pensabas. y bueno macho, hacete cargo, o el tren sigue, se va, porque es un alma y es un viaje, que sigue de largo y no para y esas puertas que estuvieron siempre abiertas pero ni siquiera sabías donde quedaban. se crea un lazo un hola, cómo estás. un sos un pelotudo. esas cosas, necesarias. genial genial. y te acordás en el subte y en el furgón y en la plaza y en el baño del laburo. te acordás, te sonreís, ja. es muy perfecto todo, mirá el cuadro pim pim pim cada cosa en su lugar, una felicidad redonda. y bueno, de eso se trata viejo, me hace ser mejor yo, me hace ser más un nada que hace todo por el y por todos, feliz él.
gracias por darme un espacio así y pasan pasan mil cosas, no es que queda ahí yo quiero darte lo mismo, no sé en forma de lo que sea, de una risa de un fiuuum o de una promesa loca de hacer cosas. me prendo me prendo porque quiero, porque me gusta, sí, me hace bien. y es raro que de la nada algo venga y pin te haga bien, pero pasa y mirá cómo. son 3 palabras y listo, hola como andás? te morís chabón! hoy no puedo. esas cosas y listo cambia todo, tu dia de gris a azul como la canción. y no podés quedarte ahí, querés que todos sean así que todos vivan esa felicidad, pero no se puede, tiene que salir de adentro, de esas infinitas ganas de abrazar, de entender el abrazo como lo que es, como un demuestre de afecto infinito y que busca esa comunión espiritual del momento de afecto, de la sensación compartida, qué groso que es, por favor. un abrazo siginificando tantas cosas posibles. un abrazo que es lenguaje y es espíritu a la vez, tan lleno de simbolos inútiles y de sensaciones eternamente profundas, casi olvidadas. entonces ves que todo esto es un hecho que es una reacción a todo lo que te pasó, en ese momento, en esa mirada, está todo listo, es así, seguí no ves que te sentís bien así?
bien
gracias